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La irresistible sensualidad de NieR: Automata

Juntos, para siempre, para siempre, para siempre.

Por ShyDude //

Me gustan los robots ¿Te gustan los robots? Algunos robots en Japón te permiten tener relaciones con ellos, y no es ilegal, a pesar de que no pueden decir que no. Creo que es genial porque me gusta el setzo y me gustan los robots.

La máxima expresión de sensualidad.

Ahora te estarás preguntando qué tiene que ver un robot setzual japonés con los videojuegos. Bueno, todo. O posiblemente nada. Honestamente, estoy lejos de aquí, pero de alguna manera tuve que justificar mencionar mi amor por los títeres setzuales japoneses de ojos muertos, o ustedes podrían pensar que soy espeluznante. No quiero eso, mi madre no quiere eso, y voy a arriesgarme a hablar en nombre de la comunidad en general y decir que tú, querido lector, no quieres eso.

De todos modos, estoy aquí para escribir sobre un juego que tiene muchos robots, que he jugado bajo la influencia del alcohol durante quizás una hora; no estoy muy seguro. Ese juego es NieR: Automata, no sé si lo hayas oído nombrar.

Por lo que puedo deducir, NieR: Automata es un juego sobre una robot ciega que también es una mucama, que trata desesperadamente de enseñarnos el verdadero significado de la Navidad usando solo sus firmes y redondeadas nalgas.

Lo primero que me gustaría decir sobre NieR: Automata es que es un videojuego divertido de jugar. Allí resumí mis sentimientos para la jugabilidad en una sola oración fácil de entender. Pero no he terminado, así que prepárate, porque me voy a poner el strap-on.

Se ha declarado (equivocadamente) una y otra vez que la protagonista 2B es totalmente cojible; que ella es el sueño de todo adolescente calenturiento; la "waifu" maestra; que ella es lo que muchos de ustedes ven cuando cierran los ojos y permiten que la oscuridad silenciosa los escolte al dulce abrazo de sus sueños más espeluznantes y húmedos.

Estás equivocado, y estoy a punto de aplicar todo el poder de la ciencia para probarlo. Porque no tengo nada que perder y Dios está muerto, después de todo.

Contempla la verdadera expresión del erotismo.

Míralo: contempla su forma y sé testigo de la irrefutable realidad de que nunca encontrarás una cosa más perfecta con quien tener setzo. Entiende en el fondo de tu corazón que todo el erotismo tiene su punto más alto aquí. No puede ir más lejos. Quieres tener setzo con esta máquina, necesitas poseer a este robot. No te niegues los placeres de su forma fría y oxidada. No niegues a tu corazón que pide a gritos, "Sí... esta cosa cilíndrica es lo único que necesito penetrar".

Uno de estos personajes es un símbolo setzual; el otro es 2B.

Estás en negación, lo sé. Ahora mismo estarás pensando que "¡Estás equivocado! ¡Estos robots no tienen lencería sexy! ¡No tienen grandes pechos ni nalgas firmes! Preferiría encender mi licuadora y meterlo ahí en lugar de hacerlo con una de esas latas oxidadas" Pero, ¿qué tienes que perder si te detienes a pensar en lo que digo incluso por un breve momento? Además, ¿qué tienes que ganar? ¡Ah!... La respuesta a lo primero es "nada"; ¿la respuesta a este último? Todo.

A partir de ahora, por el bien de los niños, todos los robots que aparezcan en esta nota serán censurados, de acuerdo con "1 Timoteo 2:9-10" que declara, "Asimismo, que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia..."

No te sujetes para siempre a la negación y rompe hasta el último muro de duda. Te ruego, a ti que estás leyendo estas líneas, que caves profundo en tu pensamiento. Arranca tus pósters de 2B. Ella nunca podrá realmente complacerte; ella nunca podrá realmente satisfacerte.

La verdadera fuente de tus deseos.

He expuesto mi caso perfecto. Es hermético; es a prueba de balas La responsabilidad recae en ti, únicamente en ti, para evitar las mentiras y seguir a partir de ahora el camino de la verdad de la que ahora eres tetsigo. No puedo caminar el camino por ti. Puedo simplemente mostrarte el camino. No puedo masturbarme por ti, ya que debes tomar tu propio miembro o vigorosamente aplicarte el vibrador, con tu propia mano. No quiero exagerar la seriedad de esto, pero esta podría ser la revelación más importante que hayas tenido. Te imploro entonces, que tomes la decisión correcta.